Los aceites de oliva virgen extra que destacan por su combinación de matices ofrecen una extraordinaria versatilidad gastronómica. Descubre sus secretos.
A día de hoy, no cabe ninguna duda de que el Aceite de Oliva Virgen Extra cuenta con un extraordinario reconocimiento gastronómico, tanto a nivel nacional como internacional, por su carácter saludable y, muy especialmente por los extraordinarios matices únicos que puede aportar a cada elaboración culinaria.
En este sentido, el Aceite de Oliva Virgen Extra cuenta con un aspecto añadido al que en ocasiones no se le presta el enorme valor que merece, y que no es otro que su versatilidad de matices organolépticos, en función principalmente de la variedad de aceituna seleccionada para su elaboración.
En base a esta reflexión, y una vez que en anteriores publicaciones en este blog hemos profundizado con detalle en aquellos usos gastronómicos que pueden resultar más recomendables para aquellos aceites de oliva virgen extra que destacan por sus notas amargas, dulces o aromáticas, hoy queremos detenernos en compartir contigo en qué platos ofrecen un resultado perfecto aquellos AOVEs que se caracterizan por ofrecer una combinación equilibrada entre estos distintos matices organolépticos.
Así, los aceites de oliva virgen extra monovarietales en los que estos diferentes matices amargos, dulces o aromáticos están presentes de una forma perfectamente equilibrada, como ocurre en el caso de aquellos elaborados a partir de aceitunas de las variedades Hojiblanca, Empeltre, Alfafara, Manzanilla Cacereña y Lechín de Sevilla, por citar algunos ejemplos, o que son fruto de la combinación cuidada de diferentes variedades para la generación de un AOVE coupage, son especialmente recomendables para la elaboración gastronómica de cremas frías y calientes, vinagretas y salsas, o como complemento perfecto en la preparación de platos de pasta y salteados.
Asimismo, estos aceites de oliva virgen extra con una mayor combinación de matices a nivel gustativo también suelen presentar una composición natural que los convierte en especialmente aptos para la realización de frituras, ya que cuentan con un ‘punto de humo’ superior al de otras variedades de Aceite de Oliva Virgen Extra monovarietales.